Estimados Socios, desafortunadamente tenemos una triste noticia para compartir con ustedes. Se trata de la muerte accidental de una joven acaróloga, muy activa en el estudio de los oribátidos, la Dra. Ekaterina Sidorchuk, de Rusia. En palabras de colegas que trabajaron con ella, Katya era «vibrante, perceptiva, brillante colega, y buena amiga de muchos», una persona «joven, amable y encantadora, y una investigadora brillante y excepcional».
Todos los años nos enteramos de la pérdida de acarólogos y eso es siempre un hecho triste. En este caso, el hecho de ser una muerte accidental, de una investigadora joven, es doblemente doloroso. Una gran pérdida para la acarología mundial.
Acompañamos a su familia en esos tristes momentos.
Alguien ocupará su lugar de investigación, ya que esta joven ha pasado a una nueva vida, dejando muchos recuerdos y vivencias compartidas con los que estuvieron trabajando con ella, solo queda seguir adelante.
Es muy triste la muerte de un joven, más aún cuando sucede en plenitud de su carrera brillante y truncada, su país es faro de la acarología universal, y sé le habrán brindado todos los honores que ha ganado y la recordarán siempre.